viernes, 19 de abril de 2013

Fundación Fran Daurel-Casa-Museo de Arte Catalán en Madrid

El empresario Francisco Daurella tiene organizada su magnífica colección de arte en dos sedes: una en Barcelona (la Fundación Fran Daurel, donde alberga el arte más contemporáneo) y otra en Madrid (Fundación AMYC, unificada ahora con el nombre de Fran Daurel, como la otra). Fran Daurel es el apodo que utilizaba Daurella al escribir sus obras literarias. Es en esta sede situada en Aravaca, en la calle Fuente del Rey nº 11, donde nos acerca al arte "novecentista" catalán a través de las 258 obras expuestas en esta mansión familiar de tres alturas y un extenso jardín. La colección permanente se inauguró el 1 de marzo del 2011. Desde aquí agradezco la gran labor desarrollada por el señor Daurella para divulgar esos artistas que resultaban algo desconocidos para el público de Madrid, así como su pasión por el mundo de la cultura, no solo el de la pintura o escultura, sino también la música a través de ciclos de conciertos u óperas representados en el auditorio de la Fundación. Se ha sabido rodear de un estupendo equipo y hago llegar mis agradecimientos para poder hacer bien este blog al personal de la entrada(Felipe y Manuel) y a la fotógrafa, Andrea,  que tan amablemente nos ha cedido el material.
Fachada principal (arriba)y jardín interior
El auge del Modernismo catalán a finales del s.XIX se debió a numerosos cambios sociales, políticos y económicos en la sociedad catalana. Supuso la culminación de la llamada Renaixença que, habiendo surgido en la década de 1830 como movimiento romántico de corte intelectual y literario, buscaba el renacer de la lengua y cultura catalana. Más tarde llegaría a tener también una vertiente política ( las Bases de Manresa de 1892, la Lliga regionalista que tendrá importancia electoral desde 1901 en España y la creación de la Mancomunidad en 1913). El Modernismo se desarrolló sobre todo en arquitectura, pero también afectó a la pintura y escultura. Se puede entender más bien como una corriente estética, por eso se extendió más en el diseño y el decorativismo. Representó el rechazo de la arquitectura funcional industrial y de la arquitectura historicista, sobre todo la vertiente clasicista que tanto éxito tuvo entre la burguesía madrileña. Lo modernistas defendían la libertad de creación, con formas más naturales, inspiradas en el mundo de la naturaleza animal o vegetal. Arquitectos destacados entre sus filas fueron, además de Gaudí, Domenech i Montaner, Julol, Puig i Cadalfach, Rubio i Bellver. Está muy unido al desarrollo de la industrialización en Cataluña de fines del sXIX, ya que se produjo un enriquecimiento de la burguesía procedente de la industria textil. A diferencia de Madrid, esa burguesía es más liberal, cercana a las vanguardias de más allá de nuestras fronteras y nacionalista con respecto a las tradiciones de su tierra.

Por lo que respecta a la pintura, en el Novecentismo catalán encontramos dos corrientes bastante opuestas: por un lado el realismo paisajista del Cercle Artistic de Sant Lluc, que se fundó en 1893. Sus miembros estaban muy vinculados al obispo de Vic y crearon un grupo donde se defendían los valores tradicionales de su tierra, el catolicismo, la clase trabajadora rural del campo catalán. Rechazaban la forma de vida, valores plásticos e ideas del mundo de la bohemia y de la burguesía urbana industrial. Su teórico es Josep Torras i Bages. También pertenecían a este grupo Gaudí, Puig y Caldafach, Llimonas, Clarasó, Baixeras, Eugeni d´Ors y otros muchos. Luego, a su vez, se iban creando otros subgrupos.
"Riera de Argentona", 1850, de Marti i Alsina, el iniciador de la escuela paisajista catalana
" Camps de fajols florits"(1880) de Joaquim Vayreda, seguidor de la escuela de paisaje realista de Alsina y de la francesa de Barbizón
"Modestia", fina escultura en bronce de Josep Llimona
"Familia de pescadores" (1883), de Dionix Baixeras. Nos muestra el trabajo de la gente humilde del mar con un realismo fotográfico y defendiendo la familia unida colaborando junta.

La otra corriente pictórica de gran importancia fue la impresionista, vinculada al café El Quatre Gats de la calle Montsió, inaugurado en 1897. Los jovencísimos Ramón Casas y Picasso le dan un gran impulso. Pero por allí también pasan Rusiñols, Nonell, Albeniz, Baroja y otros muchos que contactaran sino con el grupo en París. Serán artistas que también hagan carteles, manifiestos, revistas, veladas teatrales. Están en contacto con todo lo nuevo que viene de Francia, a donde van a estudiar o a pasar varias temporadas. 
Els Quatre Gats restaurado en una foto reciente
"Mirando al exterior" (1890), de Ramón Casas
Ramón Casas (1866-1932)es muy completo en cuanto a las técnicas y temáticas trabajadas. Contaba con medios para financiar el Quatre Gats. En París conoció a Manet y a los impresionistas, pero él no desarrolla una pintura captando la luz natural, sino una luz característica, de tonalidades grises muy melancólicas. Gozó de gran fama como retratista de la burguesía barcelonesa. Con su íntimo amigo Santiago Rusiñol (1861-1931)se dedicó unos meses a recorrer los caminos catalanes y escribir sus experiencias en una obra titulada "Por Cataluña desde mi carro" con ilustraciones de Casas y textos de Rusiñol. Resultaban lo que hoy llamaríamos jóvenes antisistema o gamberros. Rusiñol se fue decantando cada vez más por el paisaje, y así nos pinta los paisajes de todos los viajes realizados, tanto por España, como por el extranjero. De hecho, murió mientras pintaba los jardines de Aranjuez. Un ejemplo de jardín con ese toque simbolista en la luz y esa síntesis que va haciendo del color lo tenemos en el siguiente lienzo:
"Lago de Villa Falconieri" (1923) de Rusiñol
"Gitana Vieja", 1901, de Isidre Nonell. Donde nos muestra ese expresionismo en la representación de grupos sociales marginados y con una técnica a lo Van Gogh

Otro gran pintor amante de la técnica impresionista es Hermén Anglada Camarasa (1871-1959). Formado en la Academia Julién de París, gozó de mucha fama y expuso con éxito en París, Bruselas, Munich o Berlín. En la Fundación está muy bien representada su evolución: desde pequeños óleos realizados sin medios con la temática de la noche moderna en los teatros de París, el paisaje pintado en su reclusión en Montserrat durante la Guerra Cívil hasta su éxtasis colorista post-impresionista de los años finales, como este florero donde los toques de pincel del fondo de lienzo parecen pequeñas hojas puntillistas
"Dalias y peonia blanca" (1940-48), de Anglada Camarasa

En un gran salón con boissereau está la pintura más valiosa y conocida. Aquí podemos contemplar al pintor catalán más famoso del s.XIX, Mariano Fortuny (1838-1874), un genio fallecido a la temprana edad de 36 años. También se exponen dibujos suyos donde se ve su maestría. Descubrió el paisaje cuando la Diputación de Barcelona le mandó como cronista de la primera guerra africana en 1860. De allí trajo un gusto por lo exótico, por la luz, que uniría a su virtuosismo del dibujo, que daría lugar al preciosismo de Fortuny como en el pequeño cuadro del "Coleccionista"(1867)
A estas obras de Fortuny las acompañan otras del pintor valenciano Sorolla, como el estupendo desnudo de 1912 y, en la pared de en frente, se agrupan los grandes del Surrealismo: Miró con el Surrealismo de las estrellas y del mundo infantil,un surrealismo lírico con poemas en francés; incluso hay una fotografía suya con el proceso de ejecución de uno de los cuadros. Dalí y el Surrealismo de técnica realista. También podemos ver la pintura matérica de Tapies.
"Ces fleurs de mon jardin"(1959), Miró
"Pirámides de Gizeh" (1957). Dalí.

Dos vistas diferentes de la planta principal
Uno de los pintores preferidos por nuestro coleccionista es Josep Cusach (1851-1908). Militar de formación que se dedicó, desde 1882, a sus grandes pasiones: la pintura y los caballos. Desarrolló una pintura de género de temática militar, retratos e incluso obras religiosas. Es un pintor de técnica realista, muy buen dibujante. Conoce el modo de hacer de Velázquez y Manet, cuyas influencias percibimos:
"Caballería" (1892), de Cusach
"Jardin al atardecer"(1890) de Modest Urgell, con esas luces misteriosas que recuerdan al simbolismo.

Le animo querido lector a visitar la colección. ¡No se puede hacer una idea de lo variada y amplía que es!. Realmente ha conseguido una completa representación de la pintura catalana de cambio de siglo. De la planta primera, como no quiero hacer una visita exhaustiva ahora, simplemente destacaría( además de los ya mencionados del Círculo de Lluc) a Sunyer. Este autor nos muestra una síntesis cercana a Cezane en su modo de tratar el paisaje mediterráneo, también representa una mujer cercana al período clásico de Picasso: mujeres fuertes, simbolizando la madre naturaleza o la fertilidad. Tan lejanas de la imagen de mujer fatal o mujer frágil que se introduce a fines del s.XIX
"Viñas y algarrobas" (1920), de Sunyer
La fuerza del color en Emilio Grau Sala nos proporciona diferentes estilos. Uno de antes de su marcha a París tras la Guerra Cívil, donde aplicaba en muy finas capas los colores, todos dentro de una misma gama, como en "Dos nenes" y después esas gruesas capas de colores vivos y rompedores como en "Rue de Chevrese" (1965)
En la planta sótano podemos contemplar unos paisajes maravillosos, algunos ya del s.XX, como los paisajes urbanos de Amat. Además también está aquí expuesto el único lienzo pintado por una mujer en esta colección, uno s/t de Olga Sacharoff. Aprovecho la ocasión para deciros que, ya que algunos de vosotros ha comentado lo difícil que hace el sistema el ser seguidor o poder insertar comentarios, se me ocurren dos soluciones al problema: una, el seguir intentándolo, otra el hacerse seguidor de Proyecto Siema o darle a "me gusta" en facebook y hacer los comentarios al blog allí si aquí no pudieras. ¡Animo!. Pero no acaba el blog aquí ya que, pateando la zona donde se ubica la Fundación Amyc,me he encontrado con dos negocios con encanto que me gustaría incluir hoy. El primero es una tienda de decoración y regalos que se llama de Baró. Sus dueños, Carlos e Isabel, llevan 30 años en el mundo de la decoración y los complementos y. hace un año trasladaron la tienda a la calle Osa Mayor nº 45. Es una verdadera maravilla con mucho encanto el ver esas réplicas de muebles y objetos antiguos: mesas, relojes, lámparas, mobiliario infantil, adornos....con la suerte de que hay para todos los precios(se pueden hacer regalos fantásticos desde 10€). Véase las imágenes:

Otro sitio de toda la vida en Aravaca es el Restaurante Tiro con Arco, situado en la Plaza de San Anacleto nº 4. Pablo de Andrea es el dueño y también llevan 30 años con este original local, donde no solo existe una galería para practicar el tiro con arco, sino billares y un amplio y cómodo espacio donde degustar su carta( destacando las pizzas, crepes y carnes). También te lo pueden cerrar para celebraciones privadas. ¡ Qué a gusto se tiene que estar cuando llevan tanto tiempo abiertos al público!